Técnicamente se le denomina “Hallux Valgus” pero es más conocido por juanete. Se trata de una deformidad ósea del primer dedo del pie en la que éste se desplaza hacia dentro incluso subiéndose encima del segundo dedo o metiéndose por debajo de él cuando la deformidad es muy severa.
Aparece una inflamación de una pequeña bolsa de líquido que hay en el primer dedo que es lo más característico del “juanete”.
Una simple radiografía confirma el diagnostico de Hallux Valgus.
Y, ¿por qué aparece? Esta deformidad tiene un alto componente genético, es decir, hay personas que son propensas a desarrollador “juanetes” ya de nacimiento. Pero existen múltiples factores que influyen en su aparición como, por ejemplo, un calzado inadecuado, el uso excesivo de tacones o de zapatos de puntera estrecha o la obesidad debido al exceso de carga en los pies. Por otro lado, existen factores biomecánicos propios de cada persona como el pie plano, el pie equino ( con mucho puente ), el valgo o varo de rodillas que aumenta el riesgo de padecerlo.
Las personas que tienen juanetes suelen indicar dolor en la zona con el zapato puesto que se intensifica al estar un período de tiempo largo de pie o caminando. Para aliviarlo se necesita reposo relativo, se puede aplicar hielo e incluso cremas antiinflamatorias. Cuando la deformidad es muy grave se suele la cirugía para corregirla es la mejor solución.
Existen distintas férulas y correctores indicados para frenar el avance de la deformación y que suelen ser de uso nocturno. Y, también, existen otros productos para eliminar el roce del juanete con el calzado aumentando la comodidad de la persona que lo sufre.
Si crees que tienes un “juanete” visita a tu médico, fisioterapeuta o podólogo. Ellos te podrán ayudar.